Esta relación energía-empresa es compleja, cambiante y estratégica, por lo que conviene debatir sobre ella de forma periódica. Para dar forma a este objetivo la Cámara de Zaragoza ha organizado el II Ciclo sobre la Energía que en esta ocasión se ha centrado en temas que se detallan a continuación.
El elevado coste de la energía resta competitividad a las empresas españolas y amenaza la actividad industrial, para los industriales aragoneses el alto coste de la energía en España, en comparación con el resto de Europa y, sobre todo con los Estados Unidos y los países emergentes, amenaza inversiones internacionales presentes y futuras y supone un lastre para nuestra competitividad y una amenaza para nuestra recuperación económica, así lo manifiestan las empresas en el informe SITUACIÓN ENERGÉTICA EN LAS EMPRESAS ARAGONESAS, elaborado por la Cámara en 2014.
Esta jornada inaugural se centró la cuestión del coste energético en España en relación con el contexto internacional, y se debatió sobre si la solución está en la Unión Europea.
Un nuevo mapa de la movilidad se está perfilando. La consolidación de tecnologías de almacenamiento y abastecimiento energético de flotas de vehículos, la tendencia al aprovechamiento de los recursos energéticos autóctonos y la progresiva descarbonización de la economía son elementos clave que están permitiendo este cambio. En esta jornada, se presentaron las oportunidades que esta nueva forma de entender la movilidad ofrece al sector industrial.
La presencia en los mercados internacionales de las empresas dedicadas a las energías renovables es una realidad. Cada vez son más los actores locales que afrontan el reto de desenvolverse en el escenario global. Las ventajas, inconvenientes y posibilidades que estas empresas se encuentran en el proceso de internacionalización centraron las charlas de esta sesión.
Este Real Decreto por el que se transpone la Directiva 2012/27/UE del Parlamento Europeo, relativa a la eficiencia energética obliga a las grandes empresas y grupos de sociedades que cumplan con la condición de gran empresa a hacer una auditoría energética de calidad antes del 13 de noviembre del 2016 y con una frecuencia de cuatro años como mínimo. Esta auditoría habrá de cubrir al menos el 85% del consumo total de energía del conjunto de inmuebles y flota de vehículos con los que el cliente ejerce su actividad a nivel nacional.
En la jornada se abordó el estado de la cuestión a nivel autonómico, las diferentes soluciones para cumplir con el Real Decreto y se presentaron experiencias demostrativas que ya han realizado la auditoría.